miércoles, 17 de diciembre de 2008

Carritos, carros y carretas

Es parte del precio que pagamos por ser la especie que somos, supuestamente la más evoluacionada, pero si somos tan evolucionados ¿cómo es posible que nuestros bebés sean los más torpes de todos los mamíferos? A las dos horas de nacer un potrillo ya es capaz de andar solo, y las crías de los humanos tardan alrededor de un año en empezar. Este "avance" evolutivo resulta nefasto para los metros cuadrados de las casas. Me explico:
Aunque los niños vengan de uno en uno, los carros vienen como los donuts, de dos en dos. Al recién nacido, como no sabe nada de la vida el pobre, hay que sacarlo a pasear para que vaya viendo lo que esto, y claro, hay que sacarlo con el carrito del cuco para que vaya horizontal y así cuidamos su espalda; además, como no podía ser de otra manera cuando tu casa escasea en metros, ese cuco no está homologado para llevar al niño en el coche, y se hace necesaria la maxi cosi de turno para los transportes en coche. Bien, como es complicado hacer que el niño pase de su cuco a la maxi cosi, de la maxi cosi al cuco y así sucesivamente y como si nada, pues lo lógico es agenciarse el carro en el que se acopla la maxi cosi y así, cuando nos vayamos con el coche ya no molestamos al bebé y se coge todo el pack niño-silla y se acopla en el carro. Ya van dos carritos dos de niño. El bebé crece, deja de ser un recién nacido, y ya no cabe en el cuco. No, no, no nos deshacemos del carro del cuco porque nos sirve, con unos cambios sencillísimos, de silla de paseo. Vale, tenemos dos sillas de paseo para un solo niño. ¿Qué hacer? Pues ya que hay dos sillas, hombre, lo lógico es buscar el hermanito, no??? Pimpán, pimpán, y en menos de un año ¡ya hay dos bebés para dos sillas! Ah, qué placer cuando las matemáticas nos dan la razón...
Espera, que ahora pasa lo siguiente: la silla de paseo debe volver a transformarse en carrito para el cuco para poder llevar al nuevo bebé, que como le pasó a su hermano, tampoco sabe andar. Entonces, como el pequeño necesita (debería haberlo puesto entre comillas) el carrito del cuco y el de la maxi cosi, ahora el mayor necesita una nueva silla de paseo... ¡Y tres sillas para dos niños! ¿? NO, no, la respuesta es no, ya no hace falta otro hermanito, no, ya no me importa que no cuadren los números, ahora me importa más mi integridad física y mi salud mental.
Total, que mientras que el bebé pequeño necesita el cuco, te ves con tres carros que cada uno ocupa lo suyo y una de las habitaciones de la casa queda completamente inutilizada... hecho que aprovechan los que yo llamo los "galos" para hacerse fuertes en esa habitación y quedarse a vivir allí (esto ya lo explicaré mejor otro día).
¿Y no sería más sencillo como hacen en otros países donde no usan carritos, que llevan al bebé acoplado a la cadera con un pañuelo? Al menos hasta que sabe andar. Si total, la espalda ya está para el arrastre, tampoco creo que forzarla un poco más vaya a cambiar mucho, no? Claro que no me imagino al padre por la mañana llevando a dos niños a la vez a la guardería, acoplado cada uno a un lado de la cadera, mientras va sorteando las farolas de la estrecha acera y tiene que darse prisa para luego llegar a tiempo a su trabajo... sí, sería una muy curiosa estampa.
En fin, que solo me queda resignarme a que acabe la etapa de que se cansen si andan demasiado para poder eliminar los carritos. Esto sí que es aguantar carros y carretas...

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